A Día De Hoy Hay 7.500 Toneladas De Basura En Órbita
Podría Colisionar Con La Atmósfera?
Christophe Bonnal, experto de alto nivel en el CNES, ya ha expresado su preocupación por la amenaza que plantea toda la basura espacial para todas y cada una de las actividades espaciales programadas. Según él, a menudo la estación espacial internacional tiene que maniobrar para poder salir de la alta condensación de residuos espaciales.
Hoy en día el hombre no puede prescindir de ciertas aplicaciones espaciales tales como los servicios de telecomunicaciones, el observatorio de la Tierra y el medio ambiente y el clima, el satélite GPS, así como las áreas de ciencia y defensa, estando estas aplicaciones al servicio del hombre y de las cuales ya no puede prescindir.
Esto ha sido así desde el año 1957, pero la seguridad en cuanto a estos dispositivos espaciales podría verse amenazado si no tenemos más cuidado y prudencia en un futuro. Esto es porque para que haya sostenibilidad en las aplicaciones espaciales, es necesario hacerlo a través de un control remoto en órbita, cosa que cada vez se hace más complicado llevar a cabo.
En el caso de que la masa y el número de objetivos espaciales sigan creciendo continuamente, nos veríamos en serios problemas; en la actualidad hay 4.500 satélites en órbita, pero tan sólo un tercio de ellos funcionan, el resto es basura espacial que no sirve para nada. Además hay más de 2.000 piezas de vehículos espaciales sueltas, 23.000 piezas de más de 10 cm nadando por el espacio, 750.000 de más de 1 cm y más de un centenar de millones de piezas sólidas de más de 1 mm, representando todo 7.500 toneladas de deshecho espacial en órbita espacial.
El 94% de los objetos espaciales que fueron catalogados dentro de esta medición son residuos absolutamente innecesarios y potencialmente peligrosos ya que pueden caer al azar en la tierra. De esta manera y en el último estudio de Christopher, se demostró que hay hasta 1.500 km de altitud que ralentiza a los objetos orbitales y los dibuja en una espiral llevándoles a quemar las capas superiores de la atmosfera.
Tales residuos también son problemáticos debido al riesgo de colisiones en órbita, algo que el gobierno a nivel mundial debería buscar una salida coherente para que en un futuro no nos lamentemos.
